Decenas
de segovianos acuñaron hoy monedas con el logotipo de Segovia
2016, la candidatura de la ciudad a Capital
Europea de la Cultura,
en el “Tercer Día de la Ceca”,
una
jornada festiva organizada por la “Asociación Amigos de la Casa de la
Moneda” para conmemorar los tres años del inicio de las obras de
rehabilitación del Real Ingenio.
Casi
un centenar de monedas fueron acuñadas por los propios ciudadanos en la sede
de la asociación gracias a una prensa de martillo donada al Ayuntamiento
de Segovia por la Casa de Hall in Tirol (Austria). Las monedas, en aluminio,
eran hoy gratis, a diferencia de otras ocasiones en las que el material
utilizado era el cobre o la plata.
El
presidente de “Amigos de la Casa de la Moneda”, Glenn Murray, explicó que
se trataba de la primera vez que se ha acuñado con el troquel de Segovia
2016 con la fecha de 2010, tratándose, por
tanto, de una nueva moneda que deberán tener todos los coleccionistas.
En
su anverso aparece el logotipo de la candidatura y en su reverso la imagen de
los cuatro principales monumentos segovianos: el Acueducto,
el Alcázar,
la Catedral
y la Casa de la Moneda, construída por el arquitecto Juan de Herrera, por
orden de Felipe II, entre 1583 y 1588 con el apoyo de técnicos austriacos y
alemanes
El
troquel de Segovia
2016 es el que menos se ha utilizado de los ocho
de anverso que ha ofrecido la asociación, por lo que estas monedas eran las más
difíciles de conseguir por los coleccionistas.
La
sede de la asociación, que cuenta con casi 300 miembros, permanecerá hoy y
mañana abierta al público para que los ciudadanos puedan acuñar monedas,
consultar la biblioteca o recibir materiales sobre la Casa de la Moneda.
Las
obras de rehabilitación del Real Ingenio, de cuyo inicio se cumple mañana el
tercer aniversario, deberían haber terminado en marzo del año 2009. La
tardanza se explica en los descubrimientos arqueológicos que han obligado a
modificar el proyecto para ajustarse a la realidad de los diferentes edificios
que conforman el complejo de la Ceca.
Pero también, y sobre todo, los retrasos se deben a los problemas
estructurales detectados en uno de los edificios del recinto, la antigua
fundición, que será el inmueble destinado a usos culturales. Se espera que
los trabajos concluyan a finales del verano de este año.