España
Última actualización 01/10/2009@11:14:07
GMT+1
Según informaciones publicadas en El Adelantado de
Segovia, la Asociación Amigos de la Casa de la Moneda de Segovia, que ha
propuesto que el Real Ingenio sea reconocido como la fábrica industrial más
antigua, avanzada y completa que se conserva de la humanidad, está
realizando un estudio comparativo con otras plantas similares que han
sobrevivido. Así, para comprender la singularidad del edificio segoviano,
miembros de la asociación han realizado un viaje de investigación hasta
Rumania, para estudiar la ceca húngara de la ciudad de Nagybánya, (hoy
Baia Mare, Rumania), mecanizada en 1579.
Los estudios han demostrado que la mecanizada ceca de
Nagybánya, aunque seis años más antigua que el Real Ingenio, es más
pequeña y sólo conserva edificios de 1739 y 1782, según ha afirmado el
presidente de la Asociación Amigos de la Casa de la Moneda de Segovia,
Glenn Murray. “Es más, y de gran importancia comparándola con el Real
Ingenio — ha resaltado el historiador y numismático—, no conserva
resto ni traza alguna de su sistema hidráulico. En cambio, el Real
Ingenio es más grande y conserva sus edificios originales desde 1583 así
como su primitivo azud y caz”.
La ceca húngara de la ciudad de Nagybánya comenzó acuñando moneda a
martillo en el siglo XIV. Murray sostiene que a partir de 1411 hay
documentos que dan fe del derecho que tuvo la ciudad para acuñar moneda.
Además de monedas de plata y oro, en 1455 se comienza la acuñación de
moneda de cobre. Es el mismo año que en Segovia Enrique IV inaugura su
nueva ceca de martillo. Entorno a mediados del siglo XV, Nagybánya era la
segunda ceca en importancia de las cinco que había en Hungría, después
de la de Körmöcbánya (hoy, Kremnica, Eslovaquia). Se labraba gran
cantidad de moneda de oro en Nagybánya mientras que Kremnica se dedicaba
más a la moneda de plata. La ceca estuvo en parte del castillo,
intramuros de la ciudad, a la orilla del río Sasar, al parecer en el
mismo emplazamiento que la posterior ceca hidráulica.
En 1579 fue equipada con ingenios para acuñar por laminación. “Se
construyó entonces un azud en el río para desviar cierto caudal de agua
hacia la Ceca mediante un caz donde se situaban las ruedas hidráulicas.
Hoy en día, no se aprecia restos algunos del caz” ha señalado Murray
explicando que de la antigua ceca de Nagybánya actualmente solo queda una
serie de edificios del siglo XVIII que albergan el Museo de Arqueología
de la región de Maramures. “Hay escasísima, por no decir nula,
información en el museo sobre el pasado industrial del edificio”, ha
manifestado el historiador Glenn Murray.
Novedades
Última actualización 08/10/2009@16:49:49
GMT+1
La Real Casa de la Moneda – Fábrica Nacional de
Moneda y Timbre presentará el próximo día 14 en Segovia una serie
conmemorativa del “IV Centenario de la acuñación de los Centenes y
Cincuentines”, que tuvieron lugar en el Real Ingenio de Segovia en el año
1609. La presentación estará a cargo del presidente de la RCM-FNMT, Juan
Ángel Esteban Paúl, y el alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes.
Las monedas acuñadas, dos de plata, una de ellas bañada
en oro, y otra de oro, reproducen las que se consideran joyas de la numismática
española que la Ceca segoviana labró en cantidades muy limitadas al
objeto de utilizarlas como premios y obsequios reales y siempre contando
con la autorización previa del propio rey.
La primera pieza reproduce el Centén de oro emitido en 1609. Tiene un diámetro
de 73 mm., sólo tres menos que la pieza original, y una aleación de
plata de 925 milésimas, aunque está bañada en oro de 999 milésimas. Su
valor facial es de 100 euros.
El reverso es una réplica exacta de la cara del centén en el que aparece
el año de acuñación, y en el anverso, el diseño ha dado cabida a la
leyenda “España 2009. 100 euros”. Junto al escudo real del antiguo
centén puede verse la marca de la Ceca de Segovia, que no es otra que el
Acueducto.
La segunda moneda es la que reproduce el Cincuentín de 1609 (50 reales de
plata). Con una aleación de plata de 925 milésimas y un peso de 168,75
gr. el anverso imita con fidelidad el original. Esta moneda, que también
posee un diámetro de 73 mm., cuenta con un valor facial de 50 euros.
La colección se completa con una pieza de oro de sólo 1,24 gr.de peso y
13,92 mm. de diámetro, que posee un valor facial de 20 euros.